Ejem­plos de uso

Múl­ti­ples ámbi­tos de aplicación

Ther­mo-bug^® tie­nes múl­ti­ples usos. En muy poco tiem­po pue­den con­tro­lar­se las chin­ches y otros pará­si­tos en sus ambien­tes. No es nece­sa­ria nin­gu­na sus­tan­cia quí­mi­ca, y la apli­ca­ción se hace de mane­ra dis­cre­ta, sin alte­rar el fun­cio­na­mien­to nor­mal. Ave­ri­güe aquí las múl­ti­ples posi­bi­li­da­des de uso de Ther­mo-bug^®.

¡Ayu­da! Pla­ga de chin­ches con­fir­ma­da en hote­les, resi­den­cias de ancia­nos, hos­pi­ta­les y otras ins­ta­la­cio­nes públicas.

Ha suce­di­do el peor de los casos. Se le ha con­fir­ma­do que tie­ne chin­ches en la casa o usted ha detec­ta­do la pla­ga por sí mis­mo. Aho­ra lo que se impo­ne es actuar rápi­da­men­te, debi­do a que los pará­si­tos se repro­du­cen a toda velocidad.

• Lla­me a un ser­vi­cio de con­trol de pará­si­tos. Acu­den de inme­dia­to y actúan en su casa de mane­ra dis­cre­ta, silen­cio­sa, rápi­da y extre­ma­da­men­te eficiente.
• Imple­men­ta medi­das inme­dia­tas y efi­ca­ces y, ade­más, con su cola­bo­ra­ción, ela­bo­ra un plan para el con­trol de las chin­ches a lar­go plazo.

Medi­das inme­dia­tas que usted mis­mo pue­de tomar

• Clau­su­re las habi­ta­cio­nes afec­ta­das de inmediato.
• Evi­te la dise­mi­na­ción de los pará­si­tos: no saque nin­guno de los obje­tos de las habi­ta­cio­nes afectadas.

En par­ti­cu­lar, las empre­sas de alo­ja­mien­to y las ins­ta­la­cio­nes públi­cas gene­ra­les se bene­fi­cian de nues­tros apa­ra­tos silen­cio­sos Ther­mo-bug. El empleo de nues­tro ven­ti­la­dor de calor de alto ren­di­mien­to garan­ti­za un tra­ba­jo com­ple­ta­men­te dis­cre­to y efec­ti­vo. Sus hués­pe­des o pacien­tes no nota­rán que hay un ser­vi­cio de con­trol de pará­si­tos en su esta­ble­ci­mien­to. Así se evi­tan el páni­co, las par­ti­das anti­ci­pa­das y otras reac­cio­nes inne­ce­sa­rias. Ther­mo-bug^® solu­cio­na el pro­ble­ma por usted. A toda velo­ci­dad. Con una segu­ri­dad mortal.

Peli­gro detec­ta­do, peli­gro conjurado

Para no obte­ner nin­gún indi­cio de la exis­ten­cia de chin­ches a tra­vés de los hués­pe­des de su hotel o de los pacien­tes, debe infor­mar­se nece­sa­ria­men­te al per­so­nal cómo se iden­ti­fi­ca una plaga.

Esto inclu­ye conocer

• el aspec­to de los parásitos
• las pis­tas que dejan y
• sus gua­ri­das.

La detec­ción y el con­trol tem­pra­nos posi­bi­li­tan la mejor pro­tec­ción de sus hués­pe­des y pacien­tes y, por este medio, ¡se sal­va­guar­da la bue­na repu­tación de su establecimiento!