Logotipo de Thermo-bug®

¿Cómo funciona
Thermo-bug®?

La innovación para el control de chinches

Las chin­ches son una pla­ga moles­ta y cada vez más exten­di­da, des­de hote­les has­ta hoga­res. Las medi­das de con­trol clá­si­cas con insec­ti­ci­das quí­mi­cos sue­len ser com­ple­jas y per­ju­di­cia­les. Ther­mo-bug® ofre­ce una alter­na­ti­va moder­na y sos­teni­ble: un dis­po­si­tivo móvil de alta tem­pe­ra­tura que cali­en­ta las habit­a­cio­nes a más de 60 °C y, de este modo, eli­mi­na al 100 % las chin­ches, sus lar­vas y sus hue­vos.

Combate de chinches sin productos químicos

A dife­ren­cia de muchos pro­duc­tos del sec­tor, Ther­mo-bug® fun­cio­na com­ple­ta­men­te sin pro­duc­tos quí­mi­cos. El tra­ta­mi­en­to es ino­do­ro, dis­creto y silen­cio­so, ide­al para hote­les, ofi­ci­nas y hoga­res. Des­de 2005, Ther­mo-bug® mar­ca la pau­ta en el con­trol de pla­g­as. La actu­al genera­ción Ther­mo-bug® basic 3.0 es aún más com­pac­ta, poten­te y segu­ra que nun­ca.
Lo mejor de todo: ¡la tec­no­lo­gía Ther­mo-bug® tam­bién fun­cio­na con muchos otros tipos de pla­g­as!

Ventajas con Thermo-bug®

Efi­caz des­de el hue­vo has­ta el ani­mal adul­to

El calor actúa sob­re los hue­vos, las lar­vas y las chin­ches adul­tas por igu­al. Los infor­mes de expe­ri­en­cia y los estu­di­os lo con­fir­man: las tem­pe­ra­tur­as de lava­do de alre­de­dor de 60 °C ya eli­mi­nan de for­ma segu­ra las chin­ches y sus hue­vos. En el uso pro­fe­sio­nal, Ther­mo-bug® gene­ra esta tem­pe­ra­tura de for­ma gene­ra­lizada en toda la habit­a­ción, por lo que no sobre­vi­ve ni un solo ani­mal.

Sin pro­duc­tos quí­mi­cos

Dado que solo se uti­li­za aire seco, no qued­an sus­tanci­as noci­vas. Por lo tan­to, el pro­ce­di­mi­en­to es res­pe­tuo­so con el medio ambi­en­te y la salud.

Éti­ca­men­te sen­sa­to

El tra­ta­mi­en­to térmi­co es una alter­na­ti­va per­fec­ta y no tóxi­ca a los pesti­ci­das. Respon­de al deseo de un con­trol de pla­g­as sos­teni­ble y pro­te­ge el equi­li­brio ecoló­gi­co.

Base científica

Ther­mo-bug® fun­cio­na según un prin­ci­pio físi­co sen­cil­lo: el calor destruye las pro­teí­nas. Los bió­lo­gos lo llaman des­na­tu­ra­li­za­ción: a par­tir de unos 45–50 °C, las unio­nes prot­e­i­cas de las células del cuer­po de la chin­che cam­bi­an de for­ma irrever­si­ble. Si se aumen­ta la tem­pe­ra­tura por enci­ma de unos 55–60 °C duran­te al menos una hora, toda pro­teí­na se coagu­la: toda vida mue­re. Ther­mo-bug® alcan­za incluso has­ta 70 °C en espa­ci­os cer­ra­dos, lo que garan­tiza la eli­mi­nación.

Icono de calavera

100 % letal

El calor destruye las estruc­tu­ras prot­e­i­cas de todas las chin­ches y sus hue­vos. Se eli­mi­nan todas las fases de des­ar­rol­lo de la chin­che de cama, sin nece­si­dad de uti­li­zar insec­ti­ci­das.

Icono de reloj

Rápi­do y efi­ci­en­te

Por lo gene­ral, una inter­ven­ción se com­ple­ta en unas 24 horas. A menu­do, bas­ta con una sola inter­ven­ción para eli­mi­nar por com­ple­to las chin­ches de cama.

Icono de silencio

Dis­creto e ino­do­ro

Ther­mo-bug® fun­cio­na de for­ma silen­cio­sa y sin olo­res des­agra­d­a­bles. El día a día de sus hué­s­pe­des y emp­lea­dos con­tinúa prác­ti­ca­men­te sin inter­rup­cio­nes.

Icono de hoja

Res­pe­tuo­so con el medio ambi­en­te y la salud

Sin pro­duc­tos quí­mi­cos, sin resi­du­os: tras el tra­ta­mi­en­to térmi­co, las habit­a­cio­nes pue­den vol­ver a ocu­p­ar­se de inme­dia­to. Así pro­te­ge el medio ambi­en­te, los ani­ma­les y su salud.

Aplicación del método de calor

Con Ther­mo-bug®, el con­trol de pla­g­as es un jue­go de niños: sin pro­duc­tos quí­mi­cos, sin tec­no­lo­gía com­pli­ca­da, sin estrés. Con solo unos pocos pasos, pre­pa­ra la habit­a­ción y el calor hace el res­to, de for­ma fia­ble has­ta en la grie­ta más peque­ña.

Su solución contra las chinches

Ya sea para pro­fe­sio­na­les, empre­sas o par­ti­cu­la­res: uti­li­ce la inno­va­do­ra tec­no­lo­gía de calor que com­ba­te las pla­g­as de for­ma sos­teni­ble y sin pro­duc­tos quí­mi­cos. Eli­ja la opción adecua­da para sus nece­si­d­a­des.

Uti­li­ce Ther­mo-bug® aho­ra